Ya han pasado casi dos meses desde que esquié por ultima vez, por cierto cerrando la temporada con una buena bajada en Culibillas. Ahora ya, finales de mayo tocaba hacer una salida montañera pero aunque haya nevado mucho estas ultimas semanas, el calor también hizo de la suyas. Así que no quedo otra que subirse hasta el valle de Benasque, uno de mis favoritos, grandes montañas y buenos recuerdos.
Sábado, 26 de Mayo
La idea era practicar un poco travesía con unas tablas alquiladas y si ascendíamos hasta un pico más que mejor. De esta manera nos dirigimos dirección pico del Alba (3.118 m.) desde la Besurta (1.920 m.), aunque sin ningún objetivo claro más que el de disfrutar y pasar un buen día.
Así nos amanece el día en la Besurta, la zona de Aneto-Maladetas es donde más aguanta la nieve
Mi padre en este caso subiriá con raquetas de nieve, buena opción para una nieve muy pesada
A buen ritmo nos plantamos en el refugio de La Renclusa
A partir de aquí encontramos nieve continua
Allá vamos!
Pico Paderna (derecha) y pico del Alba (izquierda)
Cresterío de los Maladetas
La subida es bastante cómoda hasta aquí, donde empieza a inclinarse la subida
Mucho calor y nieve pesada, una subida un poco tediosa con esquís de travesía
Un vistazo al valle y los alrededores
A unos 2.950 m. vemos que el cielo se esta cubriendo bastante y como la subida ha sido maja, nos damos la media vuelta y a disfrutar de la bajada
Tuca Blanca de Paderna, gigantesca mole de roca ante nuestros ojos
Buenas cimas en el cara opuesta, Salvaguardia (derecha), una subida asequible para todo el mundo en verano
Comienzo del tubo formado en el mismo cuenco
Se deja disfrutar mucho
Aun quedaba bastante nieve, pero la calidad es la que es...
El día se ha cerrado, sabía decisión
Ya en los llanos de la Besurta, muy contento después de la bajada
A la bajada, reencuentro con mi amigo Alvaro que pese a no tener plaza en el refugio iba a ascender a Maladetas, lastima que no culminara en cima. No pasa nada, la montaña siempre estará ahí!
Una buena ruta, aproximadamente 1.000 metros de desnivel metidos en la piernas. Ahora de momento terminar este mes de junio con los examenes y a disfrutar del verano, espero volver pronto por estos lares. La verdad es que tenia muchas ganas de volver a salir a la montaña, uno de los lugares donde más disfruto y que me hace disfrutar la vida de una manera diferente.
Por ultimo, un pequeño vídeo para que los disfrutéis con uno de mis temas favoritos!
Gracias a Sinner y Tambalea que me han estado apoyando durante todo este invierno, estoy muy satisfecho con su trabajo.
David.